Por lo general, las posadas de oficina se envuelven en un amor fraternal donde el espíritu navideño se hace patente en cada gesto y abrazo entre las distintas áreas, y las cumbias animan a las personas a dejar sus roles cobijados por unos tragos encima.
Sin embargo, para mí y los colaboradores de YuJo!® e invitados, este evento se traduce en: vejaciones a un ex alumno, caldos de camarón escupidos directamente al rostro del mesero, gritos metaleros, ajerar al franelero en turno, daños a propiedad ajena, ataques de pánico y crudas de campeonato.
Por fortuna este año fue la excepción, y se canalizaron nuestras energías destructivas en diferentes actividades que hicieron la delicia de todos. Aquí un pequeño recuento.
Parte I - Hablando con Dios
La primera parada fue Volta Racing, donde se puede ser un cafre al volante con pocas consecuencias. ¿Por qué pocas? En un minuto conoceremos la respuesta. El equipo se dividió en dos para crear rondas clasificatorias para la gran final, la cual se conformó por: Yuca, Joel, Elías (nuevo integrante del equipo), Andrea y Taco.
El legendario Ayrton Senna decía que en la curva del circuito Spa-Francorchamps hablaba con dios. Andrea, queriendo emular a los grandes, quiso entablar dicha conversación, pero terminó estrellando su vehículo contra el muro de contención. Bandera negra, collarín 15 días y ganó Joel…
Cabe mencionar que Jeka, cual doña de Providencia, respetaba los límites de velocidad y saludaba cada vez que podía al público, pero sin usar su celular.
Parte II - Mi Cecina es Mejor que la Tuya
La famosa cecina de Yecapixtla está en Guadalajara. El lugar es mi Chula Linda y la ubicación no la recuerdo realmente, pero vale la pena la vuelta. Para mayores informes, favor de dirigirse con Andrea.
Parte III - Vietcong-GDL Connection
Quizá el punto central de la posada era dar rienda suelta a nuestros instintos destructivos, y aunque no hubo alcohol de por medio, existen otras formas de sublimarlos: dispararle al jefe, resolver ese beef pendiente con algún compañero o simplemente sentirse como en alguna película bélica. En mi experiencia, al principio las balas de pintura corrieron cerca de mi oído, luego se estrellaron en la careta (donde no duelen), para finalmente destruirse cual kamikaze en el cuerpo —como decía Forrest Gump—: parecía que algo te mordía.
Mención honorífica a Davis que masacró a todo aquel que se ponía en su camino —hasta al compa que fungía como referee del juego—, y Joel, que no dudó en dispararle a Yuca a un metro de distancia. Como dije anteriormente: resolviendo los beefs.
Parte IV - “Si Nos Rendimos Ahora, Nunca Sabremos por Cuánto Íbamos a Perder”
Cuando recién llegué a esta ciudad hace 21 años, fui invitado a un cumpleaños en el Bolerama Tapatío; fue un desastre. Turno tras turno, mi bola terminaba en la canaleta. 21 años después, las cosas no han cambiado; ahora, por lo menos, puedo tomar cerveza. Aquí definitivamente volvió a ganar Joel. El tiempo apremiaba, por lo que solamente tuvimos oportunidad de jugar una línea.
Parte V - Los Trapiches al Sol
Si se es aficionado a la cerveza, la Cervecería de Colima ofrece varias opciones interesantes. Además, la promesa culinaria termina por crear un gran-muy-buen lugar. El cansancio comenzaba a hacer estragos, mientras los platos, bebida y buena plática continuaban. Aquí se cerró con imitaciones del Tuca (¡cállese, carajo!)
Parte VI - Tú y Yo a la Fiesta…
Haciendo acopio de fuerzas, arrastré mis cansados huesos a Galaxy, donde de alguna forma pueden convivir Donna Summer, Los Ramones y mi tos. Un par de tragos después, no sé cómo, me di cuenta que era de los últimos en abandonar el lugar. Emprendí el camino a casa con una sonrisa y buenos recuerdos.
¿Necesitamos en YuJo! alcohol para divertirnos? Definitivamente. Y aunque esta haya sido la posada menos borracha en el tiempo que llevo laborando en esta empresa, se hizo patente que en YuJo! no sólo trabajamos duro, pero se echa fiesta igual de intenso.
Gustavo Ramírez
Envío de invitaciones a posadas: gustavo@yujo.com.mx